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Cinco tipos de ostiones que nos encantan a los mexicanos

¡Disfruta de su frescura! Estos son los tipos de ostiones más codiciados por los mexicanos y sus características.

Un exquisito manjar del mar. El ostión es un molusco versátil y altamente codiciado debido a su delicioso sabor, que puede ir de lo salado, dulce, ácido y hasta lo terroso, de acuerdo con su categoría.

Si bien, se desarrollan en bahías naturales y mangles de agua salobre, actualmente representan uno de los principales cultivos acuícolas en nuestro país. De acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, este molusco se comenzó a cultivar a finales de 1970, en el estado de Nayarit; con el paso de los años la producción llegó a Sinaloa, Veracruz, Baja California Sur, Tabasco y Tamaulipas, con 117 granjas ostrícolas.

Aunque en México es posible encontrar diferentes tipos de ostiones, los más populares son: chingón, piedra, Bahía Falsa, americano y Kumamoto.

Ostión Chingón

¡Uno de los más codiciados en el mercado! Según información de la distribuidora El Sargazo, esta especie se cultiva en aguas prístinas de la laguna de Guerrero Negro, parte de la Reserva de la Biósfera Ojo de Liebre, en Baja California.

Su tamaño, que va de los 10 a los 12 centímetros, ofrece una carne firme y carnosa, con sabores ligeramente salados y notas dulces. Por su suave acabado se recomienda disfrutar directamente de la concha, con un toque de limón o salsa mignotte.

Ostión Piedra

Como su nombre lo dice, su aspecto es parecido a las piedras erosionadas del mar, de color marrón, poroso y áspero. Su carne, de sabor cremosa y salada, va de los siete a los nueve centímetros al interior de su concha.

Esta especie es una de las más demandadas. En 2014 la Sagarpa amplió su periodo de veda con el fin de aplicar medidas para su conservación, recuperación y aprovechamiento. Afortunadamente ya existen algunas granjas ostrícolas dedicadas a reproducir esta especie.

Ostión Bahía Falsa

Esta especie exótica japonesa se introdujo en México en 1922. Actualmente es una de las más importantes en la acuacultura y se cultiva, a nivel comercial, en Bahía Falsa, San Quintín, Baja California.

El Sargazo indica que existen seis diferentes tallas; la más chica (90 gr) va desde los seis a los ocho centímetros, mientras que la más grande, también conocida como huarache, alcanza los 25 a los 30 centímetros de sabor.

Este producto es dulce, salado, con tonos a nuez y avellana. Su textura es carnosa y se recomienda solo, o al vapor, horno, salteados, fritos o a las brasas.

Ostión Americano

Uno de los más populares en el mercado mexicano. Su fácil producción, cultivo y captura lo hace uno de los líderes en las listas de consumo. Su concha es ovalada y alargada, con poco grosor, y puede llegar a medir de seis a quince centímetros.

El sabor y consistencia del ostión americano son ideales para disfrutar en cocteles, a las brasas, en sopas, cremas y al estilo Rockefeller.

Ostión Kumamoto

Esta especie se ha popularizado rápidamente en nuestro país debido a su delicioso sabor dulce, con toques cremosos a avellanas, en los cinco centímetros de su talla.

El nombre de este molusco proviene de la prefectura de Kumamoto, en la isla de Kyushu, en Japón, donde abunda como especie nativa. Fue hasta mediados del siglo XX cuando se introdujo a la costa del Pacífico, donde se comenzó a cultivar, desde San Quintín, Baja California, hasta Bahía Magdalena, en Baja California Sur.

Los expertos de la comercializadora Sargazo lo recomiendan consumir crudo, en su concha, acompañado con un vino Chardonnay o espumoso. Resalta sus sabores con limón, yuzu, vinagre o pimienta.

¿Por qué consumirlos?

Además de ser un producto delicioso, este bivalvo aporta una cantidad importante proteínas y omega 3, incluso en mayor cantidad que en productos como la leche, los huevos y la carne de res.

Recomendamos consumirlo únicamente en espacios que garanticen su cuidado y que lleven a cabo los debidos protocolos de higiene ya que, de provenir de aguas contaminadas, pueden producir bacterias patógenas que producen fiebres, infecciones intestinales o tifoidea.

Cuéntanos, ¿cuáles son tus tipos de ostiones favoritos y cómo acostumbras a consumirlos?

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