Migrante festejó su 4to aniversario con un evento a beneficio de Save the Children
11 chefs de todo el país se reunieron en una cena solidaria para apoyar a la niñez a través de Save the Children.
El restaurante Migrante, liderado por el chef Fernando Martínez Zavala, celebró su cuarto aniversario de una forma muy especial: con un evento benéfico titulado Comida por la Niñez Migrante, cuyo objetivo fue recaudar fondos en favor de las niñas, niños y adolescentes en situación de movilidad.
El aniversario se festejó en el Hotel Carlota en Ciudad de México, donde más de 100 comensales se reunieron para disfrutar de un menú creado especialmente por 11 grandes chefs de todo el país.
En esta edición, el talento, el sabor y la solidaridad se unieron para apoyar a los programas de Save the Children, organización que desde hace décadas trabaja en la defensa de los derechos de la infancia.
Un menú con impacto social
Los chefs y platillos que participaron en el aniversario de Migrante fueron:
- Óscar Segundo (Xoko, Guadalajara), Tamal colado con mole de algas.
- Javier Plascencia (Animalón, Valle de Guadalupe), Trucha “Steel Head” de B.C., leche de tigre de arveja china dulce, kumquats.
- Édgar Delgado (Sonia, CDMX), Buñuelo de arroz con trucha de mar.
- Manuel Victoria (AjoBlanco, CDMX), Fideua.
- Israel Arétxiga (Zeru, CDMX), Brioche de ajo negro, mantequilla ahumada, durazno asado y anchoa de Cantabria.
- Somrsi Raksamran (Galanga Thai House, CDMX), Tartaleta crujiente de coco tostado, hiervas frescas, hoja de betabel y foie gras.
- Xano Saguer y Fer Prado (Çuina, CDMX), Tartaleta de café, almendra caramelizada y sorbete de cerezas.
- Pablo San Román (Ekilore, CDMX), Salmorejo, croqueta y arroz con verduras.
- Jesús Pedraza (La Cocina del Bizco, CDMX), Trilogía de tapas, mejillones en conserva, ensaladilla rusa y angulas con Vermouth.
- Fernando Martínez Zavala (Migrante, CDMX), Pan japonés, ensaladilla rusa y tataki de atún; Tostada de calabaza mantequilla tatemada, tzirita, jocoque y aguacate; y Ceviche amarillo de totoaba, tomatillo, chiles manzanos y XO.
Cada uno colaboró con estos platillos que, más que una muestra de su cocina, representaron la gran causa que Save the Children apoya, el proteger a la niñez migrante. Aquellos niños que se han enfrentado a la violencia, trata, explotación y la negación de derechos fundamentales como educación y salud.
La cocina como acto de empatía
“La cocina también puede ser una forma de servir a la comunidad. No podemos mirar hacia otro lado cuando se trata de la niñez vulnerable. Con Save the Children hemos encontrado una forma confiable y efectiva de canalizar este esfuerzo”, compartió Fernando Martínez Zavala, chef anfitrión del evento.
Desde Save the Children, Begoña Laviña, directora de Alianzas y Sostenibilidad, también compartió el impacto de este tipo de eventos: “Cada platillo servido representa una oportunidad para proteger a una niña o un niño en situación vulnerable. La gastronomía puede ser una herramienta poderosa para el cambio social”.
Resultados que transforman vidas
Los fondos obtenidos se destinarán a ampliar la cobertura de programas de atención integral a la niñez migrante. Estos incluyen espacios amigables, salud, asistencia humanitaria, educación y apoyo psicosocial, especialmente en zonas clave del país.
En lo que va de 2024, Save the Children México ha beneficiado a más de 102 mil personas en situación de movilidad, trabajando desde hace más de cinco décadas para garantizar los derechos de la infancia.
