Cinco alimentos presentes en la dieta mexicana que ayudan a prevenir el cáncer
En la cocina mexicana existen ingredientes con propiedades específicas que han sido estudiadas por su capacidad para proteger al cuerpo humano de contraer cáncer.
En los últimos años, se ha reforzado la idea de que una dieta saludable no solo nutre, sino que también puede actuar como barrera preventiva frente a diversas enfermedades crónicas. Entre ellas, el cáncer. Y, de acuerdo con distintos estudios, hay ingredientes que pueden ayudar a prevenir el cáncer gracias a sus compuestos bioactivos.
Inclusive, muchos de ellos forman parte de la gastronomía tradicional mexicana. En Culinaria Mexicana te contamos cuáles son, a qué tipos de cáncer podrían ayudar a prevenir y qué dice la ciencia sobre ellos.
Maíz nixtamalizado
Presente en tortillas, tamales y atoles, el maíz nixtamalizado contiene antioxidantes fenólicos, que son compuestos que se encuentran en vegetales y en algunos animales. Estos se encargan de proteger al cuerpo humano del deterioro oxidativo, que se activan durante el proceso de nixtamalización. Un estudio del Journal of Agricultural and Food Chemistry (2018) demostró que el maíz azul y morado tiene un alto contenido de antocianinas, las cuales pueden inhibir el crecimiento de células cancerígenas, especialmente en cáncer de colon.
Particularmente en México, el cáncer colorrectal fue el tercer tipo de cáncer más diagnosticado en 2023, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Cancerología (INCan).

Café
Aunque se le acusó erróneamente durante décadas de ser dañino, el café ha sido rehabilitado por la ciencia. Contiene más de mil compuestos. Entre ellos, ácido clorogénico, el cual es un compuesto fenólico que actúa como antioxidante; diterpenos, un compuesto antiinflamatorio y antitumoral; y cafeína, con propiedades antiinflamatorias.
Un meta-análisis publicado en BMJ Open (2020) encontró que el consumo regular de café se asocia con un menor riesgo de cáncer de hígado, así como de mama, próstata y colorrectal. Además, se ha observado que puede ser útil en la modulación del metabolismo de las células tumorales.
La Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer retiró oficialmente al café de la lista de posibles cancerígenos en 2016. Esto señala que no hay evidencia de que cause cáncer, sino todo lo contrario. Podría proteger de contraer la enfermedad en ciertos contextos.

Frijoles
Los frijoles son esenciales en la dieta mexicana y se destacan por su contenido en fibra, saponinas y lignanos. Según un artículo publicado en Nutrition and Cancer (2019), estos compuestos ayudan a regular el crecimiento celular, reparan el ADN dañado y reducen la inflamación crónica, considerados factores clave en la prevención del cáncer.
Asimismo, se ha observado una relación positiva entre el consumo de legumbres y una reducción en la incidencia de cáncer de estómago, colon y mama. Esto es fundamental si consideramos que en México, el cáncer gástrico es la quinta causa de muerte por cáncer en hombres, de acuerdo con cifras del INEGI y el INCan.

Nopal
El nopal contiene fibra soluble, flavonoides y betalaínas, compuestos que han mostrado actividad antioxidante significativa. Estudios como el del Journal of Medicinal Food (2015) han demostrado que el nopal puede provocar la muerte programada de células tumorales, especialmente en casos de cáncer de colon y de hígado. Esto es conocido como apoptosis.
También, se ha estudiado la capacidad de los nopales para modular la glucosa en sangre. Esto contribuye indirectamente a reducir factores de riesgo como la obesidad y la inflamación, relacionados con el desarrollo de diversos tipos de cáncer.

Chile
El chile contiene un compuesto llamado capsaicina, que ha sido investigado por su posible capacidad para atacar y eliminar células tumorales. Así, studios en Cancer Research y Frontiers in Pharmacology han encontrado que la capsaicina puede inhibir la proliferación de células malignas. Así como promover su eliminación, especialmente en cáncer de próstata, pulmón y mama.
Además, el chile aporta vitamina C y carotenoides que fortalecen el sistema inmune y contribuyen a una respuesta inflamatoria equilibrada. Lo cual es esencial para proteger del cáncer.

Cáncer gástrico en México: una realidad preocupante
Según cifras del INEGI (2024), el cáncer de estómago representa el 6.5% del total de muertes por cáncer en México. A pesar de no ser el más común, su tasa de mortalidad se percibe como alta debido a que suele detectarse en etapas avanzadas. Por ello, la prevención a través de la dieta es clave. Especialmente en regiones con alta prevalencia de gastritis crónica, infección por Helicobacter pylori y consumo de alimentos procesados.
Incluir estos ingredientes en tu dieta diaria no sustituye los procesos de detección, pero sí puede ser una estrategia de prevención. La evidencia científica es clara, una dieta rica en fibras, antioxidantes y compuestos naturales puede ayudarte a proteger del cáncer y mejorar tu calidad de vida.
Y lo mejor de todo es que no tienes que buscar ingredientes desconocidos, porque los alimentos que pueden marcar la diferencia ya están en nuestra cocina mexicana tradicional.